Se empezaron a importar de Sudamérica, en el siglo XVI y tardaron otros 150 años en convertirse en uno de los alimentos básicos de Europa. Actualmente, donde más se consumen es en Europa Central y del Este, aunque están presentes en la dieta de todo el continente, con un consumo medio per cápita de 94 Kg en 2005.
Hay una serie de características nutricionales que debemos de tener en cuenta dentro de una alimentación equilibrada:
* Cocidas o asadas, las patatas son un alimento prácticamente libre de grasa. Los carbohidratos son los principales nutrientes energéticos presentes en las patatas, que se encuentran en forma de almidón.
* Son una buena fuente de fibra, contribuyen a la sensación de saciedad y facilitan la función digestiva, de vitamina C, potasio, además de contener pequeñas cantidades de magnesio y hierro.
* Las patatas casi no contienen sodio (que junto al cloruro forma la sal).
* Las patatas también contienen varias vitaminas del grupo B. Una ración media de patatas cocidas (180 g) contiene más de una sexta parte de las necesidades diarias de un adulto de las vitaminas B1, B6 y folato.
* Las patatas pueden ser muy útiles para quienes desean perder peso o evitar ganarlo. Una ración media de patatas cocidas sin piel (180 g) contiene unas 140 calorías, un contenido energético muy inferior al de la misma cantidad de pasta cocida (286 calorías) o arroz cocido (248 calorías).
* Las patatas no contiene Gluten y puede consumirse por aquellas personas que tengan que evitar esta proteína de algunos cereales.
Espero que os gusten.
